MADRID
VARIOS AMIGOS RESPALDAN LA VERSIÓN DEL ACUSADO DE APUÑALAR A UN VIGILANTE
Varios de los jóvenes que iban con el acusado de matar de dos puñaladas al vigilante de una pista de hielo en Alcalá de Henares el 1 de enero de 2007 han respaldado hoy la versión de éste y han dicho que no estaba metido en la pelea que provocó los hechos, sino sólo mirando, y que actuó para defenderse.Varios de los jóvenes que iban con el acusado de matar de dos puñaladas al vigilante de una pista de hielo en Alcalá de Henares el 1 de enero de 2007 han respaldado hoy la versión de éste y han dicho que no estaba metido en la pelea que provocó los hechos, sino sólo mirando, y que actuó para defenderse.

En su declaración como testigos en el juicio que se celebra en la Audiencia Provincial de Madrid, cuatro de los miembros de la pandilla con la que se encontraba Francisco Javier A. cuando hirió mortalmente al vigilante Ioan Grancea han afirmado que el procesado no se encontraba en el grupo que entró en la pista de hielo cerrada y que se enfrentó con el guarda cuando intentó echarlos.

Esta versión coincide con la del propio Francisco Javier A., que declaró ayer en la vista oral que él se había acercado "a ver qué pasaba" y que permanecía apoyado en la valla cuando Grancea se le acercó blandiendo el palo de hockey que había cogido para disuadir a los otros jóvenes, por lo que le "entró miedo" y se defendió con una navaja que llevaba en el bolsillo.

En la vista se juzga también al policía local Antonio T.C., al que se imputan los delitos de denegación de auxilio y de omisión del deber de perseguir el delito por no haber acudido en ayuda de la víctima cuando estaba de guardia en el Ayuntamiento, a sólo unos metros de la pista, y una mujer de la limpieza le avisó de la pelea.

El agente explicó ayer que no intervino porque no podía abandonar su puesto en el consistorio, pero que llamó a la central para que enviara una patrulla.

Varios policías locales han confirmado hoy esta versión y han asegurado que Antonio T.C. llamó dos veces desde su puesto a la central de la Policía de Alcalá de Henares para pedir una dotación, informando primero de que había una pelea en la pista de hielo y luego de que había un hombre tirado en el suelo.

Otros testigos han manifestado que el agente no se acercó en ningún momento al lugar de los hechos para intervenir en la reyerta, ni tampoco para auxiliar al herido cuando sus agresores ya se habían ido.

Por otra parte, varios agentes de la Policía Nacional han relatado que el acusado de la muerte de Grancea fue detenido al día siguiente de los hechos cuando acudió a la comisaría para interesarse por la marcha de las investigaciones y algunos de los jóvenes que habían estado en la pista de hielo le señalaron como el posible autor de las puñaladas.
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