Dentro de aproximadamente un mes los policías locales serán sustituidos por vigilantes y controladores de seguridad privada en varios edificios municipales. El objetivo es incrementar las dotaciones de patrulla por las calles de la capital, hasta en 30 agentes más, un proyecto rechazado por los sindicatos mayoritarios en el Ayuntamiento de Granada y por los grupos políticos de oposición.
La vigilancia privada correrá a cargo de la empresa Castellana de Seguridad S.A., que se ha comprometido a dotar del personal necesario al menos durante dos años, con un presupuesto de 400.000 euros por año.
Los policías que se emplean en tareas de custodia son agentes que, por cuestiones de edad, ya no hacen tareas de patrulla en las calles. Sin embargo, en trabajos de oficina en el cuartel de la Policía Local y otras dependencias hay agentes jóvenes que no pueden utilizarse en patrullas porque se necesitan como administrativos.
En principio habrá custodias privadas, sin agentes policiales, en el Auditorio Manuel de Falla y en el Carmen de los Mártires. En la sede central del Ayuntamiento en la plaza del Carmen, el complejo administrativo de Los Mondragones y en el centro Gran Capitán, la Policía Local mantendrá presencia continuada, aunque en menor número.
