Ricardo S.G., de 19 años, y José C.R., de 20, trataron de fugarse del centro el 31 de marzo de 2008. Para ello, José agarró a una educadora por el cuello, le dio varios golpes y la amenazó con un cristal. Con ella como rehén pidió a dos vigilantes que les abrieran la puerta y que no pidieran ayuda a nadie, so pena de causar más daño a la mujer. Ricardo agarró a otro vigilante por la espalda, le quitó el equipo de comunicación para que no avisara a nadie y consiguió escapar del edificio.
La educadora agredida sufrió un traumatismo craneal, cortes en las manos y un trastorno de ansiedad del que tardó en curar 139 días. El vigilante agredido sufrió varias contusiones de las que sanó en tres días.
El Juzgado de lo Penal número 1 de Badajoz condena a los dos jovenes por varios delitos: uno de atentado contra funcionario público; otro de lesiones agravadas y un tercero de quebrantamiento de condena, por la fuga del centro de Ricardo y el intento de fuga de José.
Indemnización
En conjunto, al primero se le condena a tres años y medio de prisión y al segundo a tres años y tres meses. También tienen que pagar una multa por una falta de lesiones.
Entre ambos deben pagar una indemnización de 6.900 euros a la educadora agredida por las lesiones que sufrió.
Al guardia de seguridad le deben abonar 90 euros.
La sentencia se alcanzó por conformidad, lo que es firme.
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